Encantado de conocerte, aunque sea por este medio.
Estuve en Córdoba un solo curso, el 1972-1973, haciendo COU, y después me marché con beca a hacer Psicología en Valencia (yo soy de Murcia). Antes de Córdoba Estuve 4 cursos, 3 de Oficialía y Pre-Cou en la Universidad Laboral de Sevilla.
En 1998 (¡qué bárbaro, 9 años ya!) gracias a la constancia, tesón y mucho trabajo de varios compañeros, nos juntamos en la Uni en Octubre. Nos juntamos un montón, dadas las circunstancias y el tiempo transcurrido. De aquél encuentro se editó un libro, con fotos y direcciones actualizadas (al menos en aquel momento), que más tarde los organizadores nos remitieron a casa, previo pago de la pasta que costó.
Fue muy emotivo: nos dieron un aperitivo, un mini concierto de música clásica y una bienvenida en los Reales Alcázares (¿o no se dice así? mi memoria...). Al día siguiente, una misa en la Uni, una charla del inefable y bien recordado Padre Gago, y una comida en uno de los salones practicables, con muchos de los profesores y "padres y hermanos" que nos acompañaron entonces: el padre Quintín (¿lees sus magníficos artículos que de vez en cuando escribe en EL PAÍS?), el hermano Emilio....
Estuve en Córdoba un solo curso, el 1972-1973, haciendo COU, y después me marché con beca a hacer Psicología en Valencia (yo soy de Murcia). Antes de Córdoba Estuve 4 cursos, 3 de Oficialía y Pre-Cou en la Universidad Laboral de Sevilla.
En 1998 (¡qué bárbaro, 9 años ya!) gracias a la constancia, tesón y mucho trabajo de varios compañeros, nos juntamos en la Uni en Octubre. Nos juntamos un montón, dadas las circunstancias y el tiempo transcurrido. De aquél encuentro se editó un libro, con fotos y direcciones actualizadas (al menos en aquel momento), que más tarde los organizadores nos remitieron a casa, previo pago de la pasta que costó.
Fue muy emotivo: nos dieron un aperitivo, un mini concierto de música clásica y una bienvenida en los Reales Alcázares (¿o no se dice así? mi memoria...). Al día siguiente, una misa en la Uni, una charla del inefable y bien recordado Padre Gago, y una comida en uno de los salones practicables, con muchos de los profesores y "padres y hermanos" que nos acompañaron entonces: el padre Quintín (¿lees sus magníficos artículos que de vez en cuando escribe en EL PAÍS?), el hermano Emilio....
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