Esta noche he podido acudir al recital poético de Luís Alfonso Díez qye ha presentado nuestro compañero laboral Antonio Flores Herrera.
Se ha celebrado en la Ermita de la Candelaria, lugar ideal para este tipo de actos que periódicamente organiza el Ateneo de Córdoba.
No soy yo habitual de estos eventos y he de confesar que ha sido interesante, especialmente la parte final donde han participado los presentes en una animada tertulia literaria, además de invitarnos Bodegas Campos a degustar una copa de vino.

He tenido, igualmente, ocasión de conversar brevemente con Antonio antes de dirigirse a presentar el acto.

Hoy he vuelto desde mi pueblo, Pozoblanco, con bastante tiempo por delante, a la calurosa tarde cordobesa. He llamado por teléfono a Margaret y he decidido visitarla en su casa de la Plaza de Andalucía, en la que reside desde hace más de cuarenta años.

Estuve en ella la última vez en 1980, al terminar FP, cuando le hice la entrevista que aparece en mi enlace fotográfico, y apenas ha habido cambios.
Me recibe amable, como siempre, y despues de saludarnos me muestra algunas fotos de su familia -todos desaparecidos- y otras de ella cuando era más joven.

Nació en 1923, por lo tanto tiene 88 años. Anda apoyada en un bastón -de su madre- y la voz es débil, pero la cabeza le rige perfectamente. Además recuerda las caras de muchos de sus alumnos, no así los nombres.
Al anochecer salgo de su piso, prometiéndole visitarla en breve de nuevo.

Tú eres el resultado de ti mismo